Rescatar un Pensamiento

En base al texto: Pensamiento Maya de: Mercedes de la Garza.

Por: Mario Alfonso  Hernández Romero

            El rescate del pensamiento maya significa el abrirse a una cosmovisión que rompe los esquemas tradicionales del origen del mundo.  Es necesario que mencione que me voy a referir en este caso al mundo propio de su cosmovisión.  Hablar de los mayas, implica hacer un retroceso en el tiempo y descubrir dónde hunden sus raíces las “ideas mayas acerca del universo”.

El primer acercamiento que tengo al pensamiento  maya, a través del texto de Mercedes de la Garza, hoy representa una oportunidad.  Creo que  me introduce en esta experiencia de un pueblo, de una cultura, de una religión y de una explicación maya acerca del universo.  Al conocer la semejanza que guarda con el pensamiento occidental acerca del mundo, me acerca más a entender un orden lógico en el origen de dicho mundo, en este caso el de los mayas.  Lo interesante es conocer que las semejanzas entre un pensamiento (occidental) y otro (maya) son esenciales.  Una característica esencial la voy entendiendo como algo constitutivo que da valor a esta idea que se guarda del universo en su origen.  

            Corresponde a la generación actual una gran tarea: rescatar una memoria que primeramente está grabada en los “vestigios materiales” de lo que hoy son solo ruinas.  Al  referirme a un rescate me centro en la oportunidad que hoy se tiene para ahondar en este campo que no se fija únicamente en lo material, sino en el pensamiento.  Claro que lo material fundamenta la credibilidad del pensamiento Maya.   

            Me he fijado en aspectos de suma importancia desde que he oído hablar de los mayas.  Aspectos como: símbolos y  signos  que  han servido de ruta o camino para entrar en el misterio de esta cultura: numeración, colores, elementos naturales, que al enfrentarme a ellos, tácitamente hablan de un estudio profundo, coherente y ordenado. Una “estructura cósmica” en la cosmogonía maya, me refiere inmediatamente a un orden lógico en la constitución de cada uno de los elementos que lo habitan.

             Yo creo que el sentido religioso de los mayas al encarnar representaciones simbólicas de seres divinos muestra ya una manera de pensar.  La misma necesidad de tener contacto con alguien invisible, se puede pensar, los lleva a hacerse de algo visible ante quien se pueda ofrecer culto.  Tiene cierta connotación con las prácticas cristianas católicas (no pretendo con ello anular la originalidad de sus ritos o ceremonias, antes bien, hacer una relación con mi religión).  Yo juzgo a la luz de lo leído, que los mayas, desde su intuición,  poseen ese aspecto de lo trascendente.  Como se ve en las corrientes filosóficas la necesidad de pasar de lo físico a lo metafísico, también los mayas poseían en su estructura de pensamiento el pasar de algo visible a lo invisible.

En materia de dioses, no me llama la atención el quedarme en ver los niveles o grados de la simbología, antes bien, son seres que, tienen sus manifestaciones en los elementos del cosmos.  Siempre he creído, como convicción propia, que la fuerza de la naturaleza es incuestionable.  No puedo imaginar que la naturaleza se manifieste en sus movimientos sin tener algo de misterio que podría definirlo como dios ó como vestigios de ese dios.  No quiero decir que estoy de acuerdo o no con los mayas, lo que pretendo es dejarme iluminar por su pensamiento que ofrece algo diferente en cuanto al origen no solo de la vida, sino del cosmos en total.  Las fuerzas o energías son elementales en los mayas.

Al iniciar el ensayo lo hacía con la frase: el rescate del pensamiento maya, porque creo que, como un esfuerzo de la nuestra filosofía latinoamericana, debo empezar por ese rescate con una valoración y asimilación de esta propuesta que aunque hoy parece novedosa tiene orígenes pre-cristianos.  Pensar es hacer, crear, construir, ordenar y proponer.  Hoy creo que se puede poner en ejercicio el pensamiento maya, descubriendo en él: origen, riqueza historia, cultura, identidad y manifestación de un pueblo.

Grandes misterios hechos pensamiento que hoy son gran pensamiento envuelto en un misterio.  Hay que rescatarlo.