viernes, 30 de septiembre de 2016

Lola y Josefa como actitud constante en las mujeres

En toda época seguramente podemos encontrar a mujeres representadas por Lola Montenegro y Josefa García Granados que aunque parece que difieren en la forma, no sucede en el fondo.

Seguramente alguna mujer hasta el día de hoy se sentirá identificada como mujer fuerte, directa, sin pelos en la lengua, decidida a gritar y defender lo que piensa a la manera de Josefa. Imagen que me recuerda a una conocida politóloga en la actualidad, que no únicamente es nombrada por el carácter intenso de sus palabras, sino por el tono y el lenguaje a veces vulgar que utiliza, queriendo manifestarse como una mujer que rompe esquemas, que no es como cualquiera, que quiere hacerse notar y respetar, que desea luchar por los intereses de toda la nación.

También están aquellas que de igual forma son fuertes, pero también sutiles, elegantes, gallardas, poéticas, intensas, a la manera de Lola. Ambas son una especie de arquetipo, que tienen como denominador común la intensidad de sus emociones, la crítica a la realidad de su tiempo y la defensa de los valores humanos, nacionales o colectivos que a su parecer tienen que prevalecer por encima de la reputación o las normas morales de su tiempo.

Siempre encontraremos mujeres de este tipo, y siempre habrá quien desee que se callen, porque seguramente sienten amenazados sus intereses, su hombría o su posición social. Es en estas circunstancias en que la igualdad de género no se ve por ningún lado, porque pocos hombres podrían hacer lo que hacen estas mujeres y romper con los esquemas comúnmente aceptados sabiendo que serán criticados y a veces censurados. Parece que en todas las épocas también se establecen actitudes para callar a la mujer de una o de otra forma, pero siempre habrá algunas que sabrán como sortear estas acciones y salir al paso en una sociedad crítica.

Lola y Josefa son referente del modelo de pensamiento de la mujer que se siente autónoma, libre, capaz, igual en importancia que los hombres, que se siente fuerte y empoderada, que se siente parte de la historia, que hace historia.

La personalidad de María Josefa García Granados.

La personalidad de María Josefa García Granados.
En muchas culturas, durante muchos años, a la mujer se le ha visto como un ser débil, que tiene por oficio el cuidado de la casa, de los niños; en una Guatemala actual podemos ver   el papel del sexo femenino, dentro de una sociedad machista, que no tiene toda la libertad ni la igualdad necesaria, esto lo podemos verificar desde la educación, las oportunidades de trabajo, el maltrato familiar, pero lo que más afecta a la mujer actualmente, es la estructura del pensamiento   que persiste dentro de la población.
Si esto lo podemos ver, palpar y comprobar actualmente, no podemos imaginarnos la sociedad en que vivía María Josefa García Granados, debió ser una estructura social muy fuerte; contra la cual la pepita granados luchó, denunció, aportó ideas para el surgimiento de un feminismo actual, que busca la igualdad de derechos. esta mujer debería ser una persona emblemática   para el movimiento feminista, porque tuvo la capacidad de confrontarse a personajes de alto nivel dentro de la sociedad en el siglo diecinueve.
En el escrito que realiza Aida Toledo sobre la pepita, sorprende bastante al momento de encontrarse con palabras muy fuertes, y poco común que a una mujer se le acusé de tal forma, como por ejemplo a María Josefa se le cataloga en el siglo XIX como una persona subversiva, podemos decir que si: solo con el hecho de que ella tenía acceso a la prensa ya poseía cierta ventaja, para expresarse, y denunciar; pero lo que no tenemos que dejar a un lado, son las características, la personalidad que manifiesta, su capacidad crítica, analítica, una libertad interna, una confianza en sí misma que le daba el talante para criticar a los liberales, sobre las acciones y  decisiones que tomaba sobre la población, en la cual afecta directamente a la mujer, que estaba formada con un estéreo tipo muy distinta a la que presenta pepita Granados.
Por último, podemos confirmar la personalidad de María Josefa con la siguiente frase que ella misma la escribe, que es tomada por Aida Toledo: Así dijo un filósofo pagano, Octavio Augusto, emperador romano; oh vosotros, muchachos negligentes que servís de ludibrio a los vivientes pasados el tiempo en ocio tan profundo, cual sino no hubiera coños en el mundo. (Toledo, 1998) se podría decir que no es tan fácil hallar mujeres que tengan la capacidad de expresarse de esta forma, en nuestra actualidad ha surgido algunas, pero aun así obran con cierto temor, por el machismo y un fuerte racismo que domina la sociedad guatemalteca.

Bibliografía

Toledo, A. (1998). Mujeres del bicentenario: aportes femenino en la creación de la republica de Guatemala. Honduras: Editorial Guaymuras.


La dignidad de la mujer y su derecho a la educación
Lola en este preocuparse por la mujer virtuosa, a la que la sociedad estima por su comportamiento, belleza, o cuya mujer es solo para estar al servicio de la casa, en su punto de vista de Lola, ilumina o encamina a las mujeres de su época.
Ella se basa en las necesidades de la mujer, no en apariencias sino un buscar productivo dentro de la sociedad, ir más afondo en el círculo familiar, en ayudar a una mejora  y dejar el rechazo dentro de la sociedad,  y ese dejar implica un esfuerzo dentro de los ámbitos educativos, escuchar la voz de la mujer y comprender es una plena necesidad en la formación de la mujer.
Con todos estos elementos que se derivan en una educación para la mujer, sus frutos que propone Lola para mí son muy lógicos, pero antes quisiera aclarar un poco, no ver a la mujer como un objeto doméstico, ni tampoco alguien que se deje llevar por la apariencia; en un tiempo atrás la mujer era vista como un ser débil, a la que su voz u opinión no contaba o sencilla mente no tenía valor,  en este caso la autora propone varios elementos que en futuro será de utilidad para la sociedad y para el bien de su familia.
La comprensión y el interés en un ayudar o administrar el deber del hombre, si  elegimos el camino que la autora proporciona veremos a una mujer, protagonista de su propia vida.
Ya que en su caminar ella es la principal fuente de aprendizaje para sus hijos, la podemos ver como un modelo de vida, esto no la hace ni más ni menos dentro de su entorno familiar, en ningún momento la dignidad de la mujer o del hombre se cae, tanto es así que cada uno juega un rol dentro o fuera  de la sociedad, el sentimiento o aprecio que la mujer da a conocer ya no la hace  en un ser débil, esto no la hace que se quede fuera en su romanticismo y pasión por la vida, de lo contrario busca ser, una mujer más independiente, ya no ser superficial, sino que allá una igualdad ante los ojos y la presencia dentro de la sociedad.
Pienso que hay una inmutable sensibilidad dentro de la mujer, Lola hace revelar un deber ser  en caso de la mujer, ya no verla como un objeto que se usa y se desecha sino, hacer ver que la mujer vale, que tiene principios, que siente, sufre, lucha y que quiere reconocer al ser humano en su complejidad a todos los niveles  de sociedad.

En todo esto hay un elemento muy importante que se muestra dentro de la mujer, y es la actitud con la que se basa y se eleva dentro de su vida, el amor como fuente de persona autentica, el tener o confiar, la perspectiva de una  mujer capaz y digna de emprender un papel dentro de la sociedad. 

Referencia bibliográfica:
 Herrera, G. (s,f) El poeta como consagración de lo humano. La utopía de Lola Montenegro
 



“Mujer de armas tomar”
El objetivo de este presente ensayo es exponer la figura de Josefa  García Granados (1796- 1848), conocida en el ámbito literario como la “Pepita,” desde la perspectiva que presenta  Aída Toledo, “acerca de una autora que resiste al olvido”. Para lo cual se tomaran   algunos datos que nos ayuden a entender el carácter de esta mujer.
La Pepita,  en primer lugar una mujer de su época, que su historia se desenvuelve antes de la República de Guatemala, en un contexto de enfrentamiento entre liberales y conservadores, donde las actividades independentistas marcaron la época de esta gran mujer. Miembro de la clase pudiente, que le permitió relacionarse  con los diferentes grupos de poder de su tiempo, y miembro del partido conservador. Además  Josefa García Granado,  símbolo de subversión  en  distinto niveles, fundadora de un periódico, Cien veces una;  que sirvió como una trinchera conservadora en las polémicas luchas políticas  de  los dos grupos en conflicto. Por lo que se trata de una mujer con una perspectiva muy amplia sobre su  realidad. Según Aída, “la Pepita tenía  un conocimiento amplio sobre literatura, historia, cultura y sociedad; sobre todo  porque las hijas de familias acomodadas  solían  asistir a la escuela para funcionar mas adelante  en el matrimonio, la vida en sociedad y en caso de ella,  en los negocios y escritura”.
Se puede decir, que esta mujer se sale del molde en la sociedad  de su tiempo, que participa dentro de las discusiones tanto políticas y económicas, inaceptable para la mentalidad machista. Al permanecer al lado conservador y por representar intereses criollos, la amenaza de los liberales que pretendían  eliminar en lo posible herencia  del antiguo régimen y con ello a los antiguos beneficiarios de este; hace de la Pepita un personaje que enfrenta la agresión y se convierte en estratega para responder a los ataques de los opositores. Su carácter que antepone a esta situación  se opone al estereotipo de mujer, sumisa, doliente  y sufrida; presentando por medio de la poesía y el periodismo a  una mujer con autoridad, donde no hay temor, decidida y desafiante.
Considero que en cada época de la historia ha habido  mujeres que se salen del molde, que son un referente para unos y un escándalo para otros, que es mejor el olvido. Pero Josefa Granados nos permite descubrir una forma diferente de ser mujer, que siendo esposa, madre de seis hijos; no es la tranquila y mansa paloma,  sino alguien que tiene una actitud de enfrentamiento con la idiosincrasia de su tiempo. No cabe duda que las posibilidades económicas y sus conocimientos de la Pepita, dieron lugar a atreverse a escribir y opinar, que para otras mujeres de su tiempo no era posible.


Toledo, A. (1998) Acerca  de una autora que resiste al olvido: Josefa Gracia Granados. Mujeres del Bicentenario: Aportes femeninos en la creación  de la República de Guatemala.






El verdadero rol de la mujer en la sociedad según Lola Montenegro

En la sociedad actual es común que al tratar temas relacionados con el género siempre nos refiramos al hombre en su masculinidad como el género dominante, quien todo lo puede,  dejando en segundo plano a la mujer,  en su género feminista, como débil, debe estar acompañada por un hombre para sentirse protegida pues de lo contrario nada puede hacer. Cecilia Álvarez, del Grupo Guatemalteco de Mujeres (GGM), asegura que, “a pesar de que ha habido cambios en la legislación y castigo a la violencia de género, faltan cosas por hacer”.  Existen leyes que les permite tener las mismas responsabilidades y obligaciones que alguien de su sexo opuesto pero no se cumple dejándole siempre como alguien incapaz.
Según  Lola Montenegro mujer Guatemalteca, la actitud tomada por muchos hombres es negativa pues, ella die que la mujer juega un papel muy importante en la vida social y por esta razón no debería ser excluida. El aporte que Lola da en un ámbito poético gira en torno a cómo debe ser y comportarse la mujer ante los demás, al calificarle como igual a los hombres,  en sus escritos se le puede identificar como una persona Romántica pero con  cierto rencor o dolor por lo acontecido en su vida al perder parte de su familia y sobretodo los muchos problemas  en el ámbito sentimental con personas muy cercanas a quienes amaba.
Al referirse al amor lo toma como algo mágico que va más allá de lo común, llega a creer que todo gira en torno al mismo, porque es la base para quien es poeta y de aquí que todos podemos ser grandes poetas, llenos de fantasía, pero principalmente la mujer que es mas noble.
Si bien Lola pasó por tantos momentos difíciles, es de comprender por qué busca que otras mujeres no pasen por las mismas situaciones que ella, convirtiéndose de esta manera en una imagen liberal, para quienes compartían sus ideales y le seguían de cerca mas no para otros que le llevaban la contraria.
En conclusión creo conveniente resaltar la importancia que se  ha dado a Lola por el carácter y punto de vista con respecto a la manera en que la mujer se comporta y como debería ser, un tema que otros autores califican como importante y es así como se le atribuye a esta mujer títulos especiales, en cuanto a ser parte de un legado histórico que si bien no ha cambiado mucho si ha sido punto de partida para grandes cambios de mujeres que ahora son empresarias y otras que ocupan puestos fuertes en el ambiente económico social.



Francisco de Miranda. Actor de una Independencia Soñada 

El continente americano en la segunda mitad del siglo XVlll está en un momento de transformación, porque los pensadores latinoamericanos de este periodo elaboran sus ideas filosóficas a partir de la praxis cotidiana. El caso del indígena Maya Canek (1730-1716) en la nueva España en 1761 y de José Condorcanqui (1738-1781) conocido como Túpac Amaru en Perú 1780, son dos movimientos emancipadores en el continente, qué están en contra del dominio español. El acto más fuerte por la independencia vendría por los criollos que se involucrarían en este proceso de liberación.

En este contexto surge Francisco de Miranda (1750-1816), ve la injusticia de las medidas impuestas por los españoles. Critica la actitud absolutista de control total sobre el comercio. Se preocupa por la falta de educación en las tierras americanas, ya que la corona parece tenerlos en un ambiente de ignorancia, pues, a ellos les conviene tenerlos así. Anhela que logren un comercio  con otras naciones. Cree en la unión de todos los pueblos americanos: “Que agradable y sensible espectáculo presentaran las costas de América, cubiertas de hombres de todas las naciones, cambiando las producciones de sus países por las nuestras”.

La propuesta de Miranda, en un primer momento es modificar la forma de gobierno de la corana, esto implicara ciertas restricciones al pueblo. La segunda propuesta es más inclusiva, tiene en mente la idea de una soberanía popular. Quiere retribuir el derecho de propiedad a los indígenas y afro-americanos “El Gobierno cuidara de distribuir a cada indio (que no posea propiedad suficiente) diez arpentes de tierra si es casado y cinco si es soltero”. Los criollos siempre ocuparían un lugar privilegiado en la nueva conformación del estado.

Todo el proyecto de Miranda era descolonizar la nación. El proceso dejo cosas a la deriva como el papel de la mujer en la independencia. El dejar el antiguo régimen de la colonia, no fue factor para mantener la emancipación de los pueblos. En la actualidad los nuevos conquistadores son las transnacionales que quieren despojarlos de su territorio en busca del oro negro. Aún queda tarea por hacer en el proceso de emancipación de los pueblos, con los nuevos pensadores de américa latina. Falta afrontar con actitud los problemas modernos de injusticia e ingratitud.  Las multinacionales ya no desembarcan de las carabelas sino de los aviones.

Bibliografía

Enrique dussel, e. m. (2009). el pensamiento filosófico latinoamericano, del caribe y “latino” (1300-2000). Mexico: Siglo xxi editores. 
MUJER DE AYER Y HOY

El papel de la mujer dentro de nuestro entorno social, político y familiar es regularmente reducido. El pensamiento de que es inferior al hombre puede ser en muchos de los casos la causa. Es decir existe un sistema machista que promueve el patriarcado. Pero ¿quiénes son los que sostienen este sistema machista?, ¿acaso solo los hombres o también las mujeres? El sistema machista actúa en beneficio de, porque son vistos como el “sexo fuerte”, excluye y toma como inferior a la mujer.

¿Qué le queda entonces a la mujer?, le quedan los espacios que por costumbre, tradición, hábito o imposición se le han otorgado. Y quienes se lo han otorgado a sido el mismo sistema que las considera inferiores. En el tiempo de Lola Montenegro, la mujer era vista como “ángel del hogar”, porque su lugar era en la domesticidad. Es muy evidente que sus funciones como mujer solamente le permitían mantener la casa limpia y  a los hijos. Se reduce hasta cierto punto a la mujer como a una máquina de trabajo. No se le atribuyen sentimientos, pasiones, sueños; se puede decir también que es considerada como un objeto que acompaña al hombre en sus reuniones sociales.

Pero esta forma de ver a la mujer en el siglo XIX, en Guatemala, no ha cambiado mucho en nuestros días. Dentro de las familias existen  roles que solo las mujeres deben hacerlo. Es mal visto que un hombre se ponga a “tortear” por ejemplo; hablo del entorno rural  del cual vengo. Que un hombre se ponga  a cocinar, es otro de los roles que no es concebido en muchos de los hogares rurales. Esta muy enraizado que el hombre es quien provee y la mujer es la que atiende el hogar. Es entonces una cadena que no termina porque dentro de los mismos hogares hay agentes que promueven en los hijos este pensamiento.


Es muy frecuente escuchar de los padres de familia de mi comunidad (Santa Catarina Barahona, Sacatepéquez), que: “Los estudios de diversificado es para los hijos hombres, porque las mujeres van hacer mamás y deben quedarse a cuidar los hijos en casa”. Esta forma de pensar es destinar a la mujer a una sola forma de vida, porque entonces lo demás no le corresponde. Es limitar su capacidad intelectual y sus virtudes. Un ejemplo de protesta de que las mujeres no son inferiores a los hombres, es Lola Montenegro, con su forma de vivir, amar y escribir. Es muy claro que las mujeres tienen mucho que dar en todos los ámbitos de la vida, no hay porque limitarlas a uno solo. Son tan capaces como cualquiera de liderar una vida política, intelectual y religiosa. Porque hoy también existen mujeres que han logrado abrirse caminos que rompen el sistema machista.

La utopía de Lola

“¡Qué hermosas sois, gallardas señoras blancas y lindas como luz del alba...!”
Lola Montenegro

La belleza femenina siempre ha sido vista como objeto de deseo, lo cual, muchos años pasaron con un paradigma de mujeres sumisas a muchas reglas, impuestas por una sociedad idealizada por el machismo.
Lola Montenegro (1857-1933), fue la mujer que promovió la revolución del estereotipo de una “mujer frágil, la mujer ángel, la musa inasible” (Martínez, 2009), a un consenso de igualdad entre hombre y mujer, con derechos y obligaciones, dentro de una sociedad, corrupta y devastada por la hipocresía.
Lola, es severamente atacada por la sociedad guatemalteca de su tiempo, por su forma utópica de pensamiento, por ser una mujer “fuera de serie”, y más aun contra-atacada por su poesía, en la cual manifestaba su pensamiento y su postura liberal. Defiende a toda costa a la mujer, que es sometida; propone su el realismo femenino, como la vía donde la mujer pueda desarrollarse libremente, y que puede ser libre de todo paradigma impuesto por la masculinidad.
Algo que la caracteriza, es su poesía romántica, que es efecto de muchas decepciones amorosas, siendo también el canal para alcanzar su libre expresión. Manifestó siempre su postura política liberal, y con valentía siempre expresa su pensamiento, dando brecha al rechazo de la sociedad guatemalteca. Lola es caracterizada por su pasión, tanto en la poesía y la política.
Lola, a pesar de todo su esfuerzo, no encuentra una posibilidad de cambiar la realidad en la que vive frustrada y dolorosa, buscando su acogida en la poesía y poniendo al “ser humano autentico y virtuoso”, como ciudadano del universo entero.

En su postura, Lola, caracteriza al poeta, como el ser iluminado donde no se encuentra maldad, ni hipocresía, siendo siempre sincero y garante de un desarrollo mejor para la sociedad. Así es como la sociedad guatemalteca la admira y alaga, pero al mismo la frustra y rechaza, y Lola, como mujer fuera de serie, actúa ambivalente también posponiendo su crítica de rechazo a la hipocresía de esta sociedad. La valiente combatiente, Lola, con su corriente de pensamiento pone en suspenso,  la opresión del machismo, que excluye a la mujer de toda actividad, política y económica, dejándola siempre como “el ángel del hogar”, que solo se encarga de la domesticidad y de atender las fatigas del esposo, dan lugar a la virtud del silencio impuesto.  
Análisis de la Independencia de Centroamérica

Entendemos por independencia a la formación de un país al separarse de otro del que solo formaba parte. Ahora bien, nos preguntamos. ¿Por qué se dio la independencia? Una pista clara nos la da Bohórquez cuando afirma, “hubo una general toma de conciencia de la recuperación del ejercicio de la soberanía en todas las regiones por parte de las élites criollas”.

Como vemos, los movimientos independentistas son el fruto de ser consciente que se es oprimido, explotado y que la libertad es coaccionada. En otras palabras, considero que el principal detonante fue el querer ser plenamente libres y poseer una identidad propia sin estar dependiendo del soberano de España. En el caso de Centroamérica se dio de igual manera. Eso sí, tenemos claro que se lleva acabo de manera similar, los criollos deseaban ser soberanos, pero también tiene su particularidad. A continuación expondremos sus similitudes y diferencias.

Los países de Centroamérica concebían el origen de la soberanía en el pueblo, siendo este el origen de toda autoridad. Esto lo tenemos claro en el primer artículo del Acta de la Independencia cuando dice, “Que siendo la independencia del pueblo español la voluntad general del pueblo de Guatemala”. Esta es la principal similitud con las otras independencias de América, la base de su pensamiento político era que ellos mismo eran el origen de su propia autoridad y que no dependían de nadie más.
Ahora bien, pasaremos a ver algunas de las diferencias o contradicciones que tiene la independencia de Centroamérica. La primera, esta se dio un clima de relativa paz en comparación a la independencia de EEUU y de México o las de Sudamérica. La causa de esto fue el descuido de España de las colonias, debido  a los cambios políticos que vivían. La segunda, es que se independizan de España, y el primer jefe político es un militar español Gabino Gainza. La tercera, según se independizan de España, pero ahí no más se hacen dependiente del gobierno del Imperio Mexicano de Agustín de Iturbide en 1822.

Desde nuestra postura, afirmamos que la independencia absoluta de Centroamérica, tanto de España y de México, se da precisamente el 1 de julio de 1823, cuando se forma la Provincia Unidas de Centroamérica. Consideramos ese día donde realmente se puede hablar de independencia Centroamericana, debido que ya se tiene un cuerpo político relativamente estable y una mayor organización, inclusive  tienen una Asamblea Nacional Constituyente. Asamblea dirigida por la élite criolla con pensamiento liberal, y con la visión de una sola república Centroamericana.

Referencias Bibliográficas

Bohórquez, C. Filosofía de la Independencia. Del libro de Dussel, E. (2009). El pensamiento filosófico latinoamericano, del Caribe y “latino”. (1300-2000). México: siglo xxi editores.

Historia de Centroamérica (2016). Wikipedia. Recuperado de la página web: https://es.m.wikipedia.org/wiki/Historia_de_Centroamérica


Cancinos, S. Acta de Independencia de Guatemala (digital). Slideshare. Recuperado de la página web: http://es.slideshare.net/mobile/Cancinos/acta-de-independencia-de-guatemala-y-ca
LOLA MONTENEGRO Y EL PENSAMIENTO LIBERADOR DE LA MUJER
Vivimos en un sistema social apoderado por la visión machista engendrado y transmitido por generaciones desde la antigüedad, sin ir tan lejos la biblia presenta grandes reseñas de este estado opresor contra la mujer judía del siglo l. San pablo en su carta  1º TIMOTEO 2:11-15 señala sobre la mujer: "Vuestras mujeres callen en las congregaciones; porque no les es permitido hablar, sino que estén sujetas, como también la ley lo dice". Esta restricción ante la participación de la mujer en las comunidades cristianas particularmente abre un paradójico camino hacía el racismo funcional de la mujer en la sociedad actual, especialmente en los de la Iglesia.
Lola Montenegro poeta (Guatemala de la Asunción 1857-1933) presentada en su época como una mujer fuera de serie, abre efectivamente la concientización de cómo debe ser la mujer en función a su participación ante la sociedad, en el que enmarca una actividad igualitaria entre hombre y mujer pues ella: “rechaza la división de aquellas cualidades consideradas innatas e inmutables que justificaban las puertas cerradas a la mujer en la esfera pública”. (Herrera pág.128)
Por otro lado, la postura radical o “rebelde” que parece enraizar la crítica del sistema patriarcal, Lola Montenegro pretende aniquilar todo tipo de concepciones que captan a la mujer como la que obedece ordenes, la que siempre está en casa, la del sexo frágil/ débil o ser concebida como objeto. “y en su experiencia, la mujer es en esencia  es complejidad y torbellino; porque no entienden que no existe una humanidad blanca y otra negra, sino sólo claroscuros”. (Herrera pág. 129)
Por último considero que el pensamiento liberador de Lola Montenegro hace vivificar el aprecio y la efectiva participación de la mujer ante cualquier situación tanto económica- laboral, social y religiosa. Así mismo hace desechar el concepto de la mujer como objeto sexual y placentero en el escenario de la publicidad. “En aquellos en los que expresa su condena a los juicios de los hombres, a sus manoseadas excusas, al donjuanismo”. (Herrera pág. 127)
Este pensamiento feminista de las personajes invitan a la mujer presentarse siempre fuerte y virtuosa en la que no dependa opinión opresora de las rupturas racistas, ante al sexo femenino. “La mujer virtuosa es la que ama, la que sabe amar, independientemente de la aprobación o rechazo de la sociedad”. (Herrera pág.127)
Lester Gustavo Recinos Pineda

Referencia:

Guillermina Herrera Peña. El poeta como consagración de lo humano: La utopía de Lola Montenegro.  

Poesía y feminismo.

Poesía y feminismo.
 “Me clasificaron: nena? Rosadito.
Boté el rosa hace mucho tiempo
y escogí el color que más me gusta,
que son todos.
(Rodas,A)

La poesía no siempre ha sido liberadora para todos los poetas, para muchos sí. Los pájaros azules de Darío siguen revoloteando en las cabezas de muchos. Hölderling dice del lenguaje (materia prima de la poesía):
“se le ha dado al hombre el más peligroso de los bienes, el lenguaje, para que con él cree y destruya, se hunda y regrese a la eternamente viva, a la maestra madre…” (Heidegger, 1992)
Eso es lo que precisamente ha hecho el feminismo en la poesía, ha destruido esquemas mutilantes machistas de hombres y mujeres y ha creado una nueva mujer.
En esta línea encontramos a Lola Montenegro (Guatemala 1857-1933), quien “ante la sociedad guatemalteca se alza como una mujer atípica que no casa en el arquetipo de la mujer virtuosa promovido socialmente y que enfrenta los mitos decimonónicos locales sobre lo femenino” (Peña, 2012).

“Otra mujer tal vez te agradaría
tu prudente mandato obedeciendo.
¡Yo no puedo llevar nada escondido,
ni gusto de engañar, ni fingir puedo…!”

Vemos en este fragmento su rechazo por la mujer pusilánime que solo está entregada posiblemente a la casa y al marido, así mismo sobre la “hipocresía, la mentira y el disimulo.” Nos revela así su afecto por una mujer sincera y desligada de los esquemas sociales. En otros poemas se nota su aprecio por el amor como virtud de toda mujer coherente.
Este pensamiento feminista en la poesía sigue siendo actual. Encontramos a Ana María Rodas (Guatemala 1937). Dice Méndez de Penedo sobre ella: “Su postura inicial es tajante: el machismo/ el hembrismo en simétrica oposición de contrarios. Ella en cuanto sujeto poético, se autodenomina guerrillera del amor, en la izquierda erótica, lucha armada de palabras y reivindicación feminista (Penedo, 2006).
“Pero como mi lucha / no es política que sirva a los hombres / jamás publicarán mi diario.”

Estas mujeres han usado la poesía de arma contra las determinaciones del sistema hacia ellas. Quisiera hacer mención de Gioconda Belli, nicaragüense, que me parece toma otro rumbo del feminismo: un aprecio de sí como mujer.
“Todo lo que creó suavemente
a martillazos de soplidos
y taladrazos de amor,
las mil y una cosas que me hacen mujer todos los días
por las que me levanto orgullosa
todas las mañanas
y bendigo mi sexo.

Referencias

Heidegger, M. (1992). Hölderling y la esencia de la poesía. BUenos Aires: Arte y Poesía.
Penedo, L. M. (2006). Estrategias de la subversión: Poesía feminista guatemalteca contemporánea. Obtenido de Literatura guatemalteca.com: http://www.literaturaguatemalteca.org/depenedo1.htm
Peña, G. H. (2012). El poeta como consagración de lo humano: La utopía de Lola Montenegro. En G. H. Peña, Mujeres en el bicentenario: aportes femeninos en la creación de la República de Guatemala (págs. 119-139). Guatemala: UNESCO.


LA IMAGEN QUE LA SOCIEDAD TIENE SOBRE LA MUJER
La imagen que se tiene de la mujer, es siempre, que tiene que estar en la casa, que tiene que cuidar a sus hijos, que es para servir a su marido. Así como también se piensa que, solo la mujer es la que posee belleza. Es por eso que abordare el texto de Guillermina Herrera Peña, la cual, habla sobre el pensamiento de Lola  Montenegro, una mujer feminista (1857 – 1933). Es una mujer que crítica a las mujeres de su época.
Lola es una mujer que crítica a las mujeres de su época, porque son mujeres, muy al estilo europeo que se dejaban ver, como mujeres hechas para la casa, para acoger a su esposo con cariño, para que éste se sintiera bien, después de llegar cansado de su trabajo. También tenían que cuidar a sus hijos. Era esto lo que denunciaba Lola, porque las mujeres ciegas y vanidosas, pensaban que para eso habían sido hechas, para servir a sus esposos, cuidar a sus hijos y ser las amas de casa. Este pensamiento que se tenía sobre la mujer aun no se ha perdido. Hoy en día, en algunos lugares, la mujer es vista como ama de casa. Especialmente este pensamiento se ve en las comunidades rurales, donde desde que son niñas, los papas las educan para ser amas de casa. Esto lo digo porque he conocido casos, donde las niñas, desde pequeñas se les dice: “tienes  que, aprender a cocinar, a echar tortillas, para que cuando te cases, puedas servirle a tu marido” Esta es una triste realidad, que se da en el campo, porque es donde existe más el más el machismo. También los padres le dicen a sus hijas: “tienes que buscar un hombre, que tenga trabajo, y que tenga su parcela de tierra, porque sino como te va a dar de comer”, esto se dice porque se piensa que la mujer es la que tiene que estar en la casa cuidando, a sus hijos y haciendo los quehaceres de la casa. No se piensa en que las mujeres, tienen que estudiar. Son pocas las familias que piensan en darles estudios a sus hijas. Aclaro nuevamente, se da sobre todo en el área rural.
Lola también critica, a aquella mujer “superficial”, que piensa solo en estar hermosa y llamar la atención de los hombres, y lo hacía por conveniencia, para conseguir un esposo, que tenga dinero y le pueda, complacer todas sus vanidades y caprichos de mujer. Esto se ve hoy en día, especialmente en las clases altas, porque los papas quieren que sus hijas, que son hermosas, se casen con hombres de su mismo estatus social, y si es posible con uno que tenga más dinero que ellos.

Entonces se pude ver que,  lo que Lola criticaba, no está lejos de nuestra realidad, porque hoy en día se sigue, teniendo ese mismo pensamiento. No tanto como en esa época, pero todavía perdura esa imagen sobre la mujer.
¿Independencia de quién?

“Lo español comienza a ser prescindible… pero fue la élite criolla la que hegemonizó el proceso político” (Bohórquez, 2009)
 
¿En quién reside la soberanía, quién la otorga y cómo recuperarla? Estas interrogantes pudieron fundamentar un proceso independentista «equitativo». El lejano poder español colonizador extendió sus dominios no solo sobre los pueblos originarios; sino también, sobre los mismos españoles-americanos. Economía, gobierno, organización social y política se encontraban bajo el control de la corona española. ¿Qué pues, aparte de la presunción de sangre quedaba a los criollos? En absoluto, muy poco.

La descripción de la colonia como un período de “ingratitud, injusticia, servidumbre y desolación” (2009), propuesto por Viscardo, abre el panorama de pensamiento y acción emancipadora. Había que desprenderse del yugo opresor de la corona. Así pues, comienza a pulular el ambiente de separación; y, por ende, autonomía de los pueblos americanos. Pero, estos últimos, entendidos no como los pueblos originarios de la región, sino como los españoles nacidos en América. Es decir, los criollos. 

Son ellos quienes precisamente ejecutan todo lo relacionado con la independencia. ¿Qué representaría? Ya no vivir de las migajas que caían de la mesa de la corona ¡Las riquezas no tendrían ya que marchar al otro lado del océano! El poder siempre será español; pero americano. Las ideas de igualdad, legitimidad del poder por el pueblo y la importancia del consenso social, propuestas por el humanismo jesuita, quedaron de lado.

Naturalmente, al ser independientes, el crecimiento y desarrollo económico estaría asegurado para los criollos. Ellos poseían los medios de producción y la riqueza. Y, en algún caso especial, algunos mestizos se verían también beneficiados. Pero, los indígenas, negros y esclavos, nunca alcanzarían tales esferas de «progreso» ¿Cuántos apellidos indígenas figuran en el acta de independencia? ¿Cuántas pieles negras aparecen, en las imágenes, firmando la declaración?

El grito de independencia toma sentido y significado para aquellos que «ostentaban» el poder ¿Qué tanto dista la realidad colonial-independiente de la actual? Basta detenerse y observar: enriquecimiento, racismo, esclavitud, exclusión y opresión. Realmente el poder ibérico se trasladó de manos y la riqueza mudó su lugar de almacén.

Bibliografía

Bohórquez, C. (2009). Filosofía de la independencia. En E. M. Enrique Dussel, El Pensamiento filosófico latinoamericano, del Caribe y "laitino" (1300-2000) (págs. 161-164). México: Siglo xxi editores.


YOLANDA OREAMUNO: GÉNESIS DEL PENSAMIENTO FEMINISTA EN COSTA RICA.


Luego de haber conocido el pensamiento de algunas mujeres guatemaltecas en el siglo XIX como Pepita García y Lola Montenegro, surgió mi inquietud pro explorar representantes contemporáneas en mi país. Una vez realizado una investigación superficial, descubrí el impacto que tuvo Yolanda Oreamuno y Eunice Odio en el movimiento literario pero también filosófico de  Costa Rica. Para efectos de este comentario profundizaré sobre Oreamuno y su itinerario de encuentros y fugas durante su vida. 

Yolanda Oreamuno (Costa Rica 1916- México 1956)  representa una figura controvertida al mismo tiempo que incomprendida en la aldeana Costa Rica de principios del siglo XX. Su cautivadora presencia le valió migrar tras el amor a Chile y luego una tormentosa relación en Costa Rica con un alto exponente del comunismo a la tica, que terminó colaborando con su auto-exilio en Guatemala y México . Su inquietud literaria la llevó a escribir algunas novelas sobre las realidades femeninas frente al patriarcado de su época pero también ensayos de denuncia para algunas situaciones de su época. 

Para citar algunos ejemplos, en su ensayo “El ambiente tico y los mitos tropicales”  critica abiertamente la hipocresía del costarricense al construir una imagen internacional muy distante de la realidad, lo que constituye un ambiente insoportable de apariencias a nivel del país pero también a escala familiar en el país, generando una mediocridad ambiental: “la civilización como un regalo y la cultura llega como un producto de exportación que sufre impuestos prohibitivos” (Oreamuno, 1938).  Concluye que Costa Rica esta dominada por la mediocridad del negocio pequeño sin peligros pero también sin ganancias. Por este motivo es necesario huír   existencialmente impulsado por el espíritu de lucha. 

La falta de aceptación así como su trágica situación sentimental la hizo buscar nuevos horizontes en Guatemala, donde residió en la década de los cuarenta y obtuvo la nacionalidad. Acá escribió su célebre novela “La ruta de su evasión” (1948) ganadora del premio literario 15 de septiembre. El propósito de ese texto era completar su anhelo por ser leída y aceptada en Costa Rica, situación que no logró en ese momento. En un escrito a Joaquín García Monge menciona: “Allá (Costa Rica)  actuaba en Yolanda Oreamuno, aquí (Guatemala)  comienzo a vivir en mujer”.  (Vallbona, 2006)


La ruta de su evasión la condujo a México donde murió a la corta edad de cuarenta años. Yolanda Oreamuno es en ejemplos de una generación de artistas plásticos y escritores que tuvieron que huir del ambiente aldeano de Costa Rica para mostrar su talento y expresar su pensamiento. Ella es el punto de partida para un movimiento de reivindicación de la figura de la mujer en la sociedad, menos sacralizada y mucho más real. Ella es nuestra Lola Montenegro, pues con las letras supo expresar su anhelo de ser mujer, esposa, madre y ciudadana pero no como los otros la retrataban sino como ella realmente era. 

Oreamuno, Yolanda (1938). El ambiente tico y los mitos tropicales. En: https://huellasculturales11.wordpress.com/temas-de-debate/204-2/


 Vallbona, Rima (2006). Yolanda Oreamuno. Editorial de la Universidad Estatal a Distancia: San José Costa Rica. 

Lola Montenegro como un coherente feminismo


                Lola Montenegro realiza una crítica a la imagen de mujer que se tenía. Que desde mi punto de vista aún se tiene hoy en día. Es una crítica muy acertada y muy coherente, que apoyo. Ella describe esta imagen de mujer, como una mujer de apariencias. Apariencias que muestran o ponen a la mujer como un objeto que se vende, que es un objeto para la contemplación. Que solo sirve para observarla y que no se debe tocar ni si quiera. La mujer como un ser débil y frágil, que debe ser sumisa, obediente y doméstica. En palabras mías puedo decir que presenta a la mujer como una empleada o como una esclava incluso. La mujer como un ángel del hogar. Que realice la comida, y todos los que oficios de la casa. Que no se cuenta con su apoyo ni su opinión; simplemente existe para seguir los planes y proyectos de los hombres; en muchos de los casos el esposo.

                A esta imagen Lola propone otra imagen, tomando el concepto de María Magdalena. Como una mujer que tiene el valor de ser quien es, sin que le importen los comentarios de los otros. Ella siguió a Jesús, aunque era motivo de críticas y comentarios. Ella siguió su voluntad. Lola dice que la mujer es la que ama, la que sabe amar; independientemente de la aprobación o el rechazo de la sociedad. La mujer que propone Lola es una mujer independiente. Alguien que pueda hacer lo que quiera sin que le importe lo que piense la gente. Una persona que no se preocupe de la apariencia, que simplemente sea ella; que se sienta bien con lo que presenta a los demás. También presenta a la mujer como una persona fuerte. Que pude salir adelante a pesar de las dificultades. Una persona que es capaz de estar al frente de una empresa y que no necesita de un hombre para poder triunfar.

La propuesta que propone Lola es un feminismo muy coherente y objetivo. Este pensamiento donde se le reconoce a la mujer como una persona con las mismas capacidades de un hombre. Aunque la mujer posee de ciertas virtudes diferentes que el hombre no. Haciéndola capaz de realizar otras cosas mejor que la de los hombres. Tiene otras deficiencias en las que el hombre puede complementarla y realizar el trabajo mejor. Pero generalmente tienen una igualdad en capacidades y derechos. Como la libertad, la seguridad de mostrarse tal y como ellas quieran. La fuerza interna, y en algunos casos externa. Una capacidad de amar superior, me atrevería decir. Que le vine de esta cualidad o don de poder ser madre.


La mujer es valiosa y vale lo mismo que el hombre. 
LOLA MONTENEGRO
Mujer fuera de serie en la sociedad guatemalteca de su tiempo. Mujer atípica por no casar con el arquetipo impuesto de la mujer virtuosa. Su actitud llega a verse subversiva. No comprende a la sociedad veleidosa, más la enfrenta encaminándose en turbulencias agotadoras. Se duele de la mujer que permanece prisionera en lo mitos sociales que la encarcelan. Denuncia la falsedad y la hipocresía (traidores de la patria), defiende la verdadera virtud. Todo esto lo deja expresar en sus diversos poemas con un tinte romántico.
Salta una y otra vez los roles establecidos, lo que no contribuía parecer aquella mujer virtuosa establecida socialmente. La mujer virtuosa era de idea europea: frágil, mujer ángel, musa inasible. La mujer virtuosa además tenía su esfera privada, la domesticidad. Era la de recibir al esposo con una sonrisa, sosegarlo con amor y paciencia, así contribuía a un ambiente armonioso y equilibrado de su hogar. La mujer que rompe con este paradigma es rechazada y despreciada socialmente. Se tomaba estas características como innatos e inmutables.
Aunque algunas buscaban defender la dignidad de la mujer y su derecho a la educación (ayudar y comprender al marido y administración del hogar), seguían adscritas a la ideología. Con la actitud que presenta lola, se hace una analogía del tipo de mujer virtuosa que quiere representar: “María Magdalena”. Esta clase mujeres puede verse un tanto fuera de lo normal al ser independientes, fuertes y dignas de hacer sus derechos y obligaciones.
Concluye que la mujer virtuosa es la que ama, la que sabe amar, independientemente de la aprobación o el rechazo de la sociedad. Crítica a la mujer superficial, coqueta, estatuas y el donjuanismo.  Rechaza totalmente a la hipocresía, la mentira y disimulo. Cree que en la práctica sincera del amor se da la virtud. Como sentimiento definitorio del ser humano.
Es una verdadera patriota (activismo político, lo hizo con pasión). Honró la memoria del caudillo Justo Rufino Barrios y estuvo contra el gobierno de  Manuel Lisandro Barillas y además, poetisa en las manifestaciones públicas en contra del dictador Estada Cabrera. Logró aislarse del estruendo al refugiarse en la poesía, en donde se decanta por una utopía en la que centra su ideal en el poeta como modelo de ser humano.
Lo mira como: consagrado prístino y descontaminado, guía natural e incuestionable, vive en un espacio que integra patria, altar y religión, sabio, precursor del progreso, coherente, practicador del amor, comprende la sociedad.





jueves, 29 de septiembre de 2016

Lola Montenegro como Poeta y sus conceptos de mujer

Lola Montenegro como Poeta y sus conceptos de mujer (Por Fredy)

Dolores Montenegro, mejor conocida como Lola, es mujer guatemalteca, políticamente liberal y conservadora en algunos ámbitos, se apasiona por la poesía la cual va por la línea de un pensamiento del Romanticismo.

Para iniciar diremos que es llamada una mujer fuera de serie, porque defiende a toda costa a la mujer, queriéndole dar el lugar dentro de los ambientes en donde se le ha negado su participación y la pone al mismo nivel de la figura masculina que se ha concebido desde tiempos atrás como el sexo fuerte, el que lleva siempre el liderazgo. Es llamada también la poetisa del amor porque para ella es el sentimiento que humaniza, en este caso se diría que diviniza el amor, porque para ella es el que enciende, eleva y vivifica, es el que hace sentirse vivo, por eso en sus poemas resalta el amor. Para ella todos deberían ser poetas, este era su ideal, porque el poeta es casi profeta, “siente, predice, alumbra y deifica”. El profeta practica el amor.

Con lo definido anteriormente se puede descubrir que la figura y la actitud que  Lola fue adquiriendo ha sido quizá por sufrimientos familiares o por amores fracasados que la han marcado en la vida, porque siempre  ha imperado el machismo, que ha tenido a la mujer como el sexo débil que debe estar sometida a lo que diga el hombre, la que debe permanecer en el hogar y cuidar a los hijos, la que en la sociedad no ha tenido mucha participación y  por todo esto la misma sociedad ha decepcionado a Lola, y de ahí nace el esfuerzo de liberar la existencia de la mujer que para ella debe ser una mujer no siempre sometida a estar en el hogar como la mujer doméstica, sino como un mujer libre que pueda optar por hacer las cosas que le gustan, no debe ser siempre una mujer obediente y sumisa para que no se sobrepasen sobre su dignidad y sus derechos, con esto exhorta a la mujer a dejar de sentirse débil y frágil, porque al igual que todos tiene dignidad que debe de ser respetada.

Para concluir, lo que Lola quiere es que la mujer no se defina por lo que se dijo anteriormente, sino por lo que ella es en realidad, por eso se ha preocupado por rescatar el valor de la libertad en la mujer y hace un llamado a la igualdad, para que la mujer tome su posición dentro de los ambientes que ha sido excluida, se sienta libre, con capacidad de sobresalir en la sociedad.


Referencia:

Herrera, G. (s/f) El poeta como consagración de lo humano. La utopía de Lola Montenegro 
“La mujer como un Objeto de deseo hoy en día ”

El modelo que nos propone Montenegro para una mujer es que ella debe ser sumisa, dedicada al hogar. el reflejo de la misma  virgen María  nos  propone una perspectiva más cercana a la Magdalena entonces se propone una mujer cuya virtud radique en el amor tanto por que ama como por que sabe conquistar  , sin dejarse influenciar o al amedrentar por la aprobación o desaprobación social.

La mujer hoy en día en la sociedad misma se le toma como un  “objeto sexual”, en muchos medios de comunicación se denigra mucho el cuerpo de la mujer, pero en lo personal tendría que hacerse esta pregunta  , ¿Qué esta  pasando  con las mujeres? ¿Ellas se someten a la misma sociedad o prestan su cuerpo para para un beneficio propio ?.

Cuando una persona es tratada como un objeto sexual se le deshumaniza, se le denigra como persona humana que es se le percibe única y exclusivamente como un objeto de deseo de acoso , sin tener en cuenta que se trata de un individuo con una personalidad integra a la sociedad que es útil a la sociedad misma 

Hoy en día estamos muy  acostumbrados a que la misma mujer se nos muestre ante nosotros como algo bonito que mirar, y a esto tendemos a mirarlas como objetos sexuales de ellas mismas  consciente  e inconscientemente de  lo hacemos hacia ellas.   

La atracción sexual es algo natural en el ser humano , que forma parte de nosotros de la sociedad misma,  y lo que no es bonito es el bombardeo de imágenes en donde se le denigra y deshonra , la publicidad que se le da a ella a todo tipo de venta, en este caso sino es la mujer no se vende el producto deseado ya sea masculino o femenino , ella en este caso juega un papel muy importante de marketing para la venta misma de su cuerpo .

La peor  vergüenza de todo esto es que aceptamos que se utilice el cuerpo de la mujer para vender, para adornar, que su sexualidad sea una herramienta de cambio en mano de otras personas , pero no para las propias mujeres.

Se ha asimilado que de tal forma  a la mujer como objeto de deseo que la sociedad misma sociedad  es incapaz de entender que si una mujer es dueña de sí misma, de su vida sexual y de su imagen, ella está siendo un sujeto sexual, son los ojos que la miran, los ojos que en su mente la están convirtiendo en objeto.

la mujer no solo sirve como un objeto sexual sino que ella tiene un valor importante en la sociedad de preparar la comida para sus hijos y esposo ella es la que organiza todo en el hogar hasta para educar a los hijos en los valores morales y espirituales.  

la misma mujer se tiene que dar mucho valor para ella misma ,como lo propone Lola Montenegro , una mujer que tiene que despertar ante la sociedad misma , que la hace que tenga menos derechos para la sociedad misma  , menos oportunidades para la vida de ella misma .



Referencia:
Herrera,G. "El poeta como consagración de lo humano: La utopía", en Herrera,G. (coord..)Mujeres en el bicentenario.

"Voces de hombres por la igualdad "Jose Angel Lozoya y Jose Maria Bedoya - El Deseo y El Placer

“Sumisión y Libertad”
Desde la época de la independencia guatemalteca, van surgiendo nuevos horizontes de vida.  Con la llegada del romanticismo, se va creando un nuevo orden de pensamiento; un medio de expresión sensorial llamada: la poesía. Dos grandes artífices de la época son:   María Josefa (Pepita)  y Lola Montenegro, que nos proponen un nuevo camino. En este contexto, se hace un cambio de paradigma, tal vez no abarca en su totalidad, pero deja abierta tal propuesta. Estableciendo una configuración del concepto femenino, que parte  de la sumisión hacia la libertad.
 Hay que tomar en cuenta,  que Pepita y Lola son mujeres con una faceta totalmente diferente. Una de ellas española y la otra criolla, cada una habla desde su estilo de vida y para un estilo de vida. Ahora bien, Pepita a través de sus escritos poéticos, abre una nueva postura al hecho del matrimonio; con una visión más independiente. Toledo dice: “Yo creo que ella abre,  para la conciencia femenina  guatemalteca, la posibilidad de funcionar independientemente de su pareja” (pág. 83) Lola de igual manera, propone a la mujer como una persona que puede amar; independientemente que la amen o no la amen. No necesariamente debe tener una pareja para amar.
El pensamiento de estas dos grandes mujeres,  está impregnado de un despertar, de un tomar conciencia y de actuar en base al principio de “igualdad”. Quebrando con el patriarcalismo que se ha venido dando.  En ese sentido, podríamos decir que la mujer ya no es vista como una simple ama de casa, como un objeto de placer, como un objeto de intercambio o pactos familiares. Si no, es vista como una persona que debe integrarse, como una persona que de igual manera tiene sentimientos y que tiene derecho a participación. Tal vez su postura no tiene un impacto, pero establecen un nuevo sentido de independencia sobre la mujer.
Entonces, el cambio de paradigma que acá radica, está constituido en la liberación de la mujer; sobre  patriarcalismo y el machismo. Además, se establece una concepción femenina como, la que es capaz de luchar por sus derechos. Como ser humano/persona que ha despertado de la sumisión, y se vuelca a un horizonte transformador. Donde tiene derecho a una  participación integral en la sociedad.  

Referencias:
A.   Toledo. (sf)  “Frente al imaginario retrato”
G. Herrera (sf) “El poeta como una consagración de lo humano: La utopía de Lola Montegro” 


                                                                           Jonathan Montes (2016)