lunes, 1 de septiembre de 2014

LA RIQUEZA DE UN PUEBLO SE APRECIA CUANDO HAY UN ACERCAMIENTO SIN PREJUICIOS (Abel Hernández)

LA RIQUEZA DE UN PUEBLO SE APRECIA CUANDO HAY UN ACERCAMIENTO SIN PREJUICIOS

Después de haber tenido un acercamiento con el libro sagrado de los Quichés (el Popol Wuj), leerlo, discutirlo y aclarar algunas dudas en el salón de clase; he encontrado la riqueza de un pueblo, de una civilización, la cual tenía y sigue teniendo, quizá no como en las épocas anteriores a la invasión de los españoles -menciono esto porque fue el encuentro de dos culturas y cosmovisiones diferentes, costumbres y concepciones de la divinidad totalmente distintas; en donde una cultura (españoles) se creyó superior a la otra por el simple hecho de no compartir el mismo pensamiento y por creerse más civilizados y avanzados en los conocimientos del mundo y del cosmos-, en la poca descendencia que queda en la actualidad de la civilización maya, que siguen siendo fieles a sus tradiciones, costumbres y culturas.
Viene a mi memoria una frase que es aplicable en este contexto: “Uno no ama lo que no conoce”, me he preguntado a qué se deberá este desconocimiento, será causa de un sistema educativo que pretende enseñar la historia desde otra perspectiva, es decir desde la “conquista” de los españoles, infravalorando la historia que han marcado los pueblos mayas o será falta de interés del mismo pueblo de conocer su propia historia. No sé. Analice y saque cada uno sus propias conclusiones.
Lo cierto es que cuando un grupo de personas se instala en un área geográfica, la transforma y genera cultura e historia. Es precisamente parte de esta historia la que nos han querido trasmitir los autores quichés del Popol Wuj; la forma en que entendían y concebían la realidad, el profundo respeto que existe hacia la naturaleza y desde mi punto de vista la capacidad de observación astronómica y la capacidad de construir sistemas matemáticos que los condujeron a dar una explicación de los cambios de épocas y cuantificar y predecir el tiempo y el movimiento de los astros. Acaso no es esto, una pequeña muestra de lo avanzado que era la civilización maya.   

Lo que he aprendido es que al momento de acercarse a un pueblo para conocerlo y para poder valorar la riqueza que contienen, hay que partir de algo muy elemental: acercarse sin prejuicios, porque siempre estará presente la tentación y es casi inevitable que conforme se esté leyendo o conviviendo con personas que piensan y conciben la realidad de otra manera, uno tienda a hacer el proceso mental de acomodarlo o querer forzar la historia de ese pueblo para que entre dentro de las categorías mentales que ya se poseen.

2 comentarios:

  1. Para saber cuáles son las personas que estas tierras habitaron hace 3,500 a.c., nos tenemos que apoyar de documentos antiguos que den validez de su existencia. Entonces, como dice: Abel nosotros como parte se esta cultura Maya (por el simple hecho de vivir en estos territorios) tenemos que tener el interés de informarnos más críticamente y no dejar a un lado de donde provenimos, y ver de la forma quienes eran realmente los que dueños de estas tierras.
    Si nos damos cuenta los españoles pensaban que no eran personas, pero al ver la situación de la realidad ellos también tenían sus comercios, su arte, su sistema de vigesimal de numeración. Por tanto decimos que eran matemáticos aunque ello no lo sabían, porque era una capacidad de exactitud que desarrollaban apara hacer todo lo de la numeración y una gran visión sobre el tiempo. De aquí el ensayo de Abel “la riqueza de un pueblo se aprecia cuando hay un acercamiento sin prejuicios”. Como equilibrar el conocimiento que somos una cultura que por falta la dedicación a ver nuestra realidad que existió. Es decir, los prejuicios no pueden ser reales sino conocemos como tal realidad. Todo lo que tenemos es sin duda alguna por que los escritos comunican a nosotros la realidad de los pueblos mayas, por lo tanto en el libro sagrado el Popol Wuj muestra el relato de una creación fundamentada por realidades de pensamiento, que tanto en conocimiento y el pensamiento es base en el que no se puede decir que los mayas eran ignorantes.

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    1. Solo una duda: ¿cómo puede ser posible ser matemático con la precisión que tuvieron los mayas y no saberlo?...

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